La gente llegó a asociar pertenencia y comunidad a través de céspedes a veces maniáticamente inmaculados.

El césped está prohibido en Las Vegas.

El cortador de césped a gasolina cobra vida con un rugido. Pronto aparece una cuadrícula de rectángulos. Luego, como una espátula debajo de una hoja de torta, la hierba se separa de su sistema de raíces, se levanta y se lleva para su eliminación. La eliminación de césped verde y exuberante se está convirtiendo en algo común en estos días en Las Vegas, Nevada, ya que ahora es ilegal cultivar incluso pequeños céspedes para uso estético.

Ya no hay suficiente agua para regarlas.

El césped estadounidense comenzó como un espejo de la casa señorial inglesa, con toda su grandeza, riqueza y poder. Los céspedes representaron la transición de una sociedad agrícola a una industrial, ya que, sin la necesidad de utilizar la tierra para cultivos, los patios estadounidenses se convirtieron en un símbolo de estabilidad y control.

Irónicamente, ese ideal de césped como estatus se ha convertido en ley en muchas comunidades: debe plantar césped frente a su casa o se enfrentará a violaciones del código. Los entornos suburbanos son mejores, según esta perspectiva, si tienen el mismo aspecto en todo el país. Su césped delantero debe estar limpio, bien recortado y ricamente verde. Ha habido poca tolerancia para las desviaciones de un césped a incursiones exóticas como flores silvestres, vegetales o materia no orgánica.

Muchas casas suburbanas del desierto en Las Vegas y otras regiones del sudoeste tienen jardines en el patio delantero que se asemejan más a un suburbio de 4 estaciones que a uno con el desierto fuera de la vista. En lugar de plantaciones que prosperan en el suelo pesado, limoso y salado del área, los céspedes en estos lugares son un monocultivo que falla a los animales y plantas nativos, ya que los céspedes generalmente no ofrecen fuentes de agua ni sustento alimenticio. El fertilizante y los productos químicos aplicados al césped a menudo se lavan y terminan como contaminantes del agua. Los fertilizantes pueden provocar la proliferación de algas en los estanques locales, mientras que los productos químicos pueden dañar a los peces y a los animales que los comen.

Dejando de lado esos problemas, el problema que ha hecho que los céspedes estén prohibidos en Las Vegas y otras comunidades del desierto es el agua. Es decir, los céspedes requieren cantidades excesivas de agua y esa agua se disipa rápidamente.

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