Beijing reaccionó este martes a los recientes anuncios del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien planea imponer un arancel adicional del 10% a las importaciones provenientes de China y otros países. La embajada china en Washington reiteró que una guerra comercial no beneficiará a ninguna de las partes y llamó a reforzar la cooperación económica.
Liu Pengyu, portavoz de la embajada, subrayó que las relaciones comerciales entre China y Estados Unidos han sido históricamente mutuamente beneficiosas. “China considera que la cooperación económica y comercial sino-estadounidense es clave para ambos países”, afirmó en un correo enviado a la AFP.
En defensa de sus recientes acciones, Pengyu destacó que, tras una reunión bilateral en 2023, Pekín tomó medidas significativas para detener la exportación de materiales relacionados con la producción del opioide fentanilo, que ha sido señalado como una de las principales causas de sobredosis en Estados Unidos. “Afirmar que China permite intencionadamente el flujo de precursores de fentanilo es una acusación totalmente alejada de la realidad”, añadió.
Las propuestas de Trump, que incluyen poner fin al estatus de nación más favorecida de China y aumentar los aranceles hasta un 60%, representan un desafío para la ya debilitada economía china. Pekín enfrenta una prolongada recesión en el sector inmobiliario, riesgos de endeudamiento y una demanda interna en declive, lo que podría complicar aún más la relación comercial entre ambas potencias.
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